SEGUNDA EDICIÓN LA COMUNIDAD DE FE: ACUERDOS DE FE



Basado en la Biblia Versión Reina - Valera Revisión de 1960 (RVR60)

5.3.3 EL GRUPO MINISTERIAL DE MAESTROS


Por diversas circunstancias, razones o situaciones, la recepción de los mensajes en las predicaciones no es captada en un cien por ciento. Es importante dar una asistencia en la instrucción, de forma individual o personalizada, y en grupos pequeños, por lo tanto, a través de estudios bíblicos aclarar las dudas de cada miembro eclesiástico. Por medio de lecciones durante un período establecido, se puede abarcar en forma completa cualquier tema complejo y se logra el tiempo óptimo o más requerido para el aprendizaje. Esta labor compete al grupo ministerial de maestros, para consolidar y promover el estudio e investigación como biblistas.


Los maestros son los responsables de enseñar con el sistema de estudios bíblicos, impartido de las siguientes maneras:


a. Dentro del auditorio principal, casa de oración o templo, ya sea en forma general o distribuida por grupos.


b. En aulas, si las instalaciones de la iglesia están acondicionadas.


c. En los hogares de cada familia o al reunir varias familias en una misma casa (estudios bíblicos familiares).


Según sea el caso, el grupo ministerial de maestros establece, organiza y planifica programas de estudios bíblicos con horarios, lugares, los maestros titulares y suplentes. Además, es el responsable de capacitar a los obreros ministeriales, buena comunicación con el proceso de publicaciones, para la edición del material didáctico impreso, digital o informático en páginas web. Imparte el discipulado doctrinal, una enseñanza más personalizada, llevan el control del avance y nivel de aprendizaje de cada discípulo, para un control adecuado y seguimiento sistemático.


El credo, confesión o profesión de fe o dogma, es materia de los maestros como los especialistas en adoctrinar y desarrollar temas profundos. Otros grupos ministeriales, también tienen integrantes con el dominio de la enseñanza, pero a los maestros les corresponde adoctrinar con capacidad y gran preparación demostrada, especialmente como doctores de la ley, doctrinas profundas y otras enseñanzas bíblicas difíciles de entender (2 Pedro 3.15 al 16), ejercen como biblistas especializados.


La Biblia es un océano de conocimiento, en el cual el discípulo con ayuda del maestro puede adentrarse hasta lo más profundo de cada enseñanza. Los evangelistas proporcionan la leche espiritual, mientras que los maestros dan la vianda espiritual (Hebreos 5.12 al 14). Después del cumplimiento de la misión de los evangelistas, seguros de llegar al tope de preparación con cada persona evangelizada, entonces los maestros inician su función de capacitación, para dar cimientos sólidos en el credo, confesión o profesión de fe o dogma a los nuevos conversos. Estas son las dos etapas iniciales de aprendizaje en los nuevos conversos, antes de la etapa de trabajo pastoral y pastorales específicas.


Para dar confianza, esperanza y ayudar en las debilidades y problemas de las personas, se requiere reforzar su fe por medio de la convicción. Según la capacidad de recepción y asimilación del mensaje, mediante un proceso de aprendizaje, se aumenta gradualmente el conocimiento del discípulo, con la finalidad de la aceptación y práctica de cada enseñanza. Esto, previo a la transición del nuevo converso al grupo ministerial de pastores, quienes le dan el mantenimiento necesario para permanecer y perseverar en los principios, verdades y valores adquiridos.


Los maestros son los encargados del mantenimiento y operación de los sitios o páginas web, redes sociales, presentaciones, material didáctico y libros digitales, sistemas informáticos de control y seguimiento del avance de aprendizaje del discipulado.